La votación, que se saldó con 221 votos a favor y 212 en contra, fue una victoria para los republicanos, que llevan meses investigando a la familia Biden por sus supuestos negocios en el extranjero.
Los republicanos acusan a Biden de tráfico de influencias por haber intervenido, supuestamente, en favor de su hijo Hunter, así como otros familiares y socios cercanos, en negocios en el extranjero aprovechando sus conexiones políticas.
En concreto, los republicanos sostienen que Biden se reunió en al menos 22 ocasiones con socios extranjeros de su hijo, y que la familia Biden recibió más de 15 millones de dólares de empresas y gobiernos extranjeros de Ucrania, Rusia, Kazajistán, Rumanía y China entre 2014 y 2019.
Biden ha negado todas las acusaciones, y ha calificado la investigación de "un ataque político" de los republicanos.
La aprobación de la investigación de juicio político es un paso importante en el proceso, pero no significa que Biden vaya a ser destituido de su cargo.
Para ello, la Cámara Baja tendría que aprobar dos artículos de juicio político, que luego tendrían que ser aprobados por el Senado con una mayoría de dos tercios.
Los demócratas tienen mayoría en el Senado, por lo que es muy improbable que Biden sea destituido.
Sin embargo, la investigación de juicio político podría tener un impacto en las elecciones presidenciales de 2024.
Los republicanos podrían utilizar la investigación para atacar a Biden y tratar de movilizar a sus votantes.
